La correcta gestión de las vacaciones de los funcionarios es fundamental para no afectar la productividad de tu empresa, especialmente pensando en aquellas temporadas en las que son solicitadas de forma masiva (festividades, fin de año, verano, etc.).
Por lo tanto, es necesario que el dueño de la compañía y el personal administrativo aprendan a programarlas e implementar buenas prácticas al respecto, como las siguientes:
Para programar vacaciones de funcionarios se puede recurrir a dos estrategias: pactarlas a través del diálogo o definirlas de manera unilateral en el contrato de trabajo.
Si bien es cierto que la contratación de talento humano obedece a un sin número de variables (renuncias, crecimiento empresarial, etc.), hay que realizar la integración de personal pensando en que su periodo vacacional no coincida con las temporadas de mayor productividad.
Por ejemplo, si la normativa laboral exige que todo trabajador debe tener vacaciones cada año -y tu Pyme se dedica a la comercialización de juguetes- no es conveniente incorporar funcionarios a la nómina fija durante los meses de noviembre y diciembre, pues al siguiente año tendrán derecho a sus vacaciones justo en el momento en que más se necesitan.
Antes de que cada empleado salga a un periodo de vacaciones hay que garantizar su reemplazo, recurriendo a contratos a plazo fijo de personal calificado.
No es recomendable asignar sus funciones al resto de la plantilla, pues esto significaría una sobrecarga laboral que puede afectar la productividad de la empresa y el bienestar de los trabajadores.
Cuando las vacaciones de varios empleados coinciden para una misma temporada -especialmente cuando la actividad es alta-, es necesario llegar a acuerdos claros con ellos y priorizar solicitudes. Así, evitaremos inconvenientes entre los trabajadores y posibles disgustos de ellos hacia la empresa.
Para programar vacaciones de funcionarios de manera inteligente y evitar el impacto de las mismas en la productividad de la empresa, es necesario crear políticas empresariales al respecto.
Esto se refiere a establecer derechos y obligaciones para la solicitud de vacaciones en Chile y disfrute, que deben ser conocidas a fondo por todos los trabajadores.
Es sumamente importante implementar un sistema de gestión vacacional que permita, con tiempo, reaccionar ante el impacto que puede generar la ausencia de funcionarios, como la organización del trabajo o la eventual contratación de reemplazos, entre otros.
Además, con diálogo, ellos mismos pueden anticipar su período de descanso y organizar actividades o salidas fuera de la ciudad, aliviando el estrés al que están sometidos durante el año.
De esta manera, todos los trabajadores podrán planificarse con tiempo, aprovechando al máximo este (tremendamente necesario) período de descanso. Después de todo, no se trata solo de tus empleados, sino también de sus familias: se deben coordinar los tiempos de todos para que lo planeado resulte.
¿Qué pasa si, por mala organización, debes re agendar el descanso de uno de ellos? Probablemente, arruinarás meses de coordinación con su familia, y más que un relajo, le traerás problemas y disgustos.
Además de que son un derecho de todos los trabajadores, las vacaciones reportan excelentes beneficios para la empresa. Entre éstos, los más importantes son:
Estos beneficios son de vital importancia para el óptimo funcionamiento de todos los frentes de la empresa. Sin embargo, es importante saber programar vacaciones de funcionarios y gestionarlas pensando en cada uno de los empleados, para que no se conviertan en obstáculos dentro del proceso productivo y todos puedan gozar tranquilamente de un merecido tiempo de descanso.