¿Te has preguntado si un finiquito se puede pagar en cuotas? Cumplir con esta indemnización ante los trabajadores, una vez termina la relación laboral, puede suponer un gran peso para las empresas.
Por ello, tal vez pienses que pagar esta liquidación de manera fraccionada representa un alivio financiero, por lo cual necesitas analizar la viabilidad legal de esta opción.
Administrar de forma correcta el tema de haberes imponibles y remuneraciones también conlleva una eficiente gestión de los finiquitos, atendiendo las exigencias del Código del Trabajo, pero a la vez cuidando las finanzas organizacionales.
Dicho esto, a continuación te explicaremos si un finiquito se puede pagar en cuotas y muchos otros elementos de interés al respecto.
Un empleador sí puede pagar las indemnizaciones del finiquito laboral en cuotas, siempre y cuando se cumplan determinadas estipulaciones legales.
El artículo 169 del Código del Trabajo de Chile permite a las partes pactar plazos de amortización. Sin embargo, esto debe hacerse de mutuo acuerdo y el empleador no puede decidir unilateralmente fraccionar los pagos.
El pago sucesivo impone ciertas condiciones:
La ley establece que si un empleador no cumple con el acuerdo, la deuda debe pagarse en su totalidad de inmediato, a lo cual se adicionará una multa que dependerá de la cantidad adeudada y el tiempo de morosidad.
Es decir, si la empresa está de acuerdo con la fecha de pago y luego no se adhiere a ella, el trabajador puede exigir que se cancele el acuerdo y se pague el resto de la deuda a través de una liquidación única.
En el Código del Trabajo se define el finiquito como el acto por el cual el trabajador y el empleador acuerdan dar por terminada la relación contractual ante un funcionario público.
Este documento debe especificar claramente el motivo del despido o la renuncia y todos los acuerdos celebrados por las partes, en cuanto a los términos, la compensación y el monto que el empleador debe pagar al trabajador.
La importancia de un finiquito es que libera a las partes de toda responsabilidad que pudiera derivarse del contrato de trabajo que los vinculaba originalmente. Este desligamiento se refiere a compromisos futuros, pues los corrientes tienen que completarse.
La compensación legal por años de servicio debe ser pagada por el empleador en el momento del finiquito y esta se calcula con base en el sueldo líquido del trabajador.
En concreto, equivale a 1 mes de remuneración por cada año trabajado, con un tope de 11 años y, en consecuencia, de 11 salarios.
La liquidación y el pago deberán ponerse a disposición del trabajador dentro de los 10 días hábiles siguientes a su salida, al menos que se pacte un fraccionamiento siguiendo los lineamientos legales expuestos en la sección anterior.
Si el trabajador no está de acuerdo con el monto final de indemnización, puede hacerlo constar en el documento de finiquito, aunque acepte determinados pagos pendientes de salarios anteriores.
Es importante destacar que, si bien el finiquito debe ser aprobado en presencia de un ministro de fe, este documento se puede presentar vía web, en la página de la Dirección del Trabajo.
En caso de preferir la opción presencial, puedes acudir a las Inspecciones del Trabajo o a una notaría.
Independientemente del método de presentación, para que sea válido tiene que estar suscrito por ambas partes, quienes pueden designar un representante mediante poder notarial simple.
En caso de despido, si el trabajador no está de acuerdo con el motivo tiene derecho a no firmar el documento.
Los empleadores deben estar al día con las contribuciones al seguro de pensiones, de salud y de desempleo de manera oportuna antes del último día del mes anterior al despido. Además, tienen que haber cubierto los pagos variables que haya devengado el trabajador, como, por ejemplo, las horas extra.
En líneas generales, calcular un finiquito en Chile demanda establecer y sumar los siguientes valores:
En primer lugar, el finiquito en sí debe estar adherido a la ley desde el primer momento en que es abordado el trabajador para un potencial despido.
Un contrato solo puede rescindirse por causas legales expuestas en los artículos 159, 160 y 161 del Código del Trabajo. Estas incluyen problemas económicos de la empresa, mutuo acuerdo o faltas comprobables de algunas de las partes.
Por otro lado, pagar el finiquito a plazos es una opción legal, mas no una imposición. Por lo tanto, si el empleado no está de acuerdo no está obligado a aceptar el convenio.
Tomando en cuenta esto, te recomendamos los siguientes consejos para negociar con los trabajadores con los que planeas terminar una relación laboral:
Ahora que sabes que un finiquito se puede pagar en cuotas y las claves para negociar con los trabajadores, debemos resaltar la importancia de contar con un software de remuneraciones como el de Nubox que te permita registrar y centralizar toda la información referente a liquidaciones y pagos pendientes.
De esta manera, tendrás a mano todos los datos necesarios para calcular un finiquito y ser transparente con los empleados.
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