En los tiempos que corren, el estrés es algo casi habitual, sobre todo en quienes trabajan en contabilidad financiera o tributaria: cumplir metas, cuadrar balances y efectuar pago antes de los plazos, entre muchas otras responsabilidades que cumplir contra el reloj. Trabajar en contabilidad puede ser estresante.
Pero tranquilos amigos/as, pues existen diversas formas para hacerle frente al estrés, y casi todos tienen que ver con instaurar algunos hábitos saludables al día a día.
Ser contador es una actividad que demanda de mucha concentración, trabajo bajo presión y rigurosidad, por lo cual el estrés suele ser parte del día a día.
Sabemos que hay momentos en que no das para más, como cuando llega el pago del IVA a mitad de mes o a finales de éste, cuando las remuneraciones te dejan con los nervios de punta.
Sin embargo, los siguientes consejos te ayudarán a prevenir o reducir el estrés propio de esta profesión:
La alimentación influye considerablemente en un cuadro de estrés y, si no se lleva una dieta balanceada, esto se reflejará en tu estado de ánimo y podría ser un agravante en situaciones de alta tensión al trabajar en contabilidad.
Al sentirse agobiado, no es recomendable guardarse esas preocupaciones para sí mismo, ya que esta acción solo logrará aumentar la ansiedad. Por el contrario, si compartimos lo que nos pasa con personas que sean de nuestra confianza, ellos podrán ayudarnos a ver soluciones que nosotros no somos capaces de encontrar. Exteriorizar las cargas emocionales siempre es un alivio.
El cerebro pierde su concentración luego de ciertos períodos de realizar tareas repetitivas y metódicas. Por este motivo, es recomendable tomar descansos pequeños (5 a 10 minutos aproximadamente) entre 1 o 2 horas de trabajo continuo.
Considerando que las labores de trabajar en contabilidad requieren de constancia, claridad mental y metodología, organizar el tiempo ayudará significativamente para prevenir el estrés. Se recomienda ordenar las tareas por prioridad, para así comenzar con aquellas que realmente son de mayor relevancia.
Cuando se experimentan cuadros de ansiedad, la respiración ayudará a mantener las crisis de estrés bajo control. Para ello es necesario sentarse, cerrar los ojos por un momento, tomar conciencia de la forma en la cual se respira y luego comenzar a regular la velocidad, hasta que esta se vuelva natural y tranquila.
Si en el aspecto laboral no sabemos cómo solucionar una situación o estamos demasiado tensos como para encontrar una respuesta, solicitar apoyo a algún colega nos demostrará que el trabajo en equipo puede resolver varios problemas.
Las endorfinas -también conocidas como las "hormonas de la felicidad"- son el principal motivo por el cual el ejercicio ayuda al estrés. Cuando realizamos actividad física se liberan estos componentes a través de nuestro organismo, brindándonos tranquilidad y armonía, mejorando el estado de ánimo.
No todo en la vida puede ser trabajo. Es muy importante dedicarle tiempo al relajo: salir con amigos, una tarde en el parque, ir al cine o lo que prefieras, pero relajar el cuerpo y mente ayudarán a evitar el estrés. De esa forma, es más fácil llevar un equilibrio entre la vida laboral de trabajar en contabilidad y vida personal.
Dormir bien es de suma importancia para controlar el estrés. Y esto no es solo dormir al menos 8 horas diarias, sino que el sueño debe ser de calidad, es decir, con el menor número de interrupciones posibles. Es recomendable no ver televisión o revisar el smartphone antes de irse a la cama.
El estrés es parte de la contabilidad y eso es un hecho. Sin embargo, puedes mantenerlo bajo control siguiendo los consejos que acabamos de darte, ¿qué te parecen? ¿Realizas alguno?