Un asesor de confianza es aquel que puede demostrar que sabe tratar a sus clientes y los coloca en el centro de cada decisión. Que está listo para escuchar sus necesidades cambiantes y crecientes. Aquellos que aprenden del pasado, actúan en el presente y ganan en el futuro.
Los clientes están esperando más de ti y de tus prácticas. En consecuencia, debes adoptar nuevas formas de trabajo en tu negocio contable. La profesión es más competitiva que nunca y eso significa que debes mantenerte actualizado de los cambios para brindar un servicio realmente diferenciador. Debes ver en la tecnología un aliado para mejorar tu productividad y automatizar tus prácticas.
Las relaciones profesionales basadas en la confianza y la lealtad dan como resultado una mayor eficiencia en el trabajo debido a que existe un propósito. Ahora que sabes por qué deberías convertirte en un asesor de confianza, aquí te dejamos cuatro consejos que te ayudarán a que sea una realidad:
A veces, la mejor respuesta a una pregunta de un cliente es una mejor pregunta. Es importante que te asegurares de que comprendes lo que tu cliente pregunta y por qué necesitas saberlo. Esto te ayudará a darle las respuestas adecuadas.
La comunicación es esencial en un asesor de confianza y debes asegurarte de que fluya con tus clientes. Debe ser un diálogo que permita trabajar en las tareas fijadas. No importa el canal de comunicación: cara a cara, llamadas telefónicas, correo electrónico o redes sociales. Lo importante es que la información no quede retenida.
Cada cliente tiene puntos débiles; las cosas que le hacen perder el sueño. Identificarlos y ofrecerles una solución ayudará a que seas visto como un asesor confiable.
Seguir en tiempo real los datos financieros de tus clientes puede ayudarte a ofrecerle soluciones o detectar problemas antes de que ocurran. La tecnología en la nube te permite estar conectado con la información de tus clientes las 24 horas, los 7 días de la semana. Esto te ayudará a que, si encuentras alguna anomalía, no tienes que esperar hasta la próxima reunión con tu cliente, sino que puedes levantar una alerta temprana y presentar soluciones.