A la hora de preparar la entrada de nuevo personal a la empresa, contar con una plantilla de contrato de trabajo es una excelente estrategia para ahorrar tiempo y optimizar los recursos disponibles.
Los modelos de este tipo de documentos pueden adaptarse a diferentes situaciones, tales como contrataciones tradicionales, teletrabajo y suspensión laboral temporal, respetando siempre las disposiciones jurídicas vigentes.
Pero qué relevancia tienen los contratos de trabajo. Los contratos son el vínculo legal entre el trabajador y la empresa; sin embargo, su verdadero significado trasciende este hecho.
En el contrato de trabajo se estipulan elementos claves de la relación laboral, como, por ejemplo, las funciones del empleado, el sueldo, sus derechos y obligaciones, el horario y el tipo de documento suscrito.
Además de los aspectos mencionados, en Chile se exige que dicho instrumento legal incluya la identificación detallada de las partes involucradas y el lugar y la fecha de la celebración del acuerdo.
Ten presente que los ítems mencionados comprenden la información básica que debe tener un contrato de acuerdo con la legislación chilena; no obstante, el documento puede contener otros datos relevantes, entre ellos:
Aprender cómo hacer un contrato de trabajo es un recurso fundamental para los empleadores, ya que este documento rige la interacción con el profesional contratado y garantiza el cumplimiento de la ley por parte de la empresa, promoviendo un sano clima laboral.
Vale la pena destacar que es posible que el instrumento contenga un anexo de contrato de trabajo, que no es más que el registro de los nuevos acuerdos celebrados por las partes, en fecha posterior a la firma del documento original.
El punto de partida para la elaboración de este instrumento legal es definir qué tipos de contrato de trabajo necesitas según los requerimientos de la empresa y la relación que sostendrá con el empleado.
En este sentido, el Código del Trabajo chileno, en su artículo número 6, establece que el contrato de trabajo puede ser individual o colectivo, entendiéndose el primero como el acuerdo celebrado entre un empleador y un trabajador.
Por otra parte, el contrato de trabajo colectivo involucra la participación de uno o más empleadores, organizaciones sindicales o grupos de trabajadores unidos que buscan negociar beneficios colectivos.
Estas categorías principales agrupan otras subcategorías de contratos diferenciadas por su propósito, duración y tipo de vínculo laboral, a saber:
Tal y como su nombre lo indica, el contrato indefinido no tiene fecha de caducidad. Este documento suele estar acompañado de otras condiciones laborales ventajosas, por lo que se trata del más buscado por los trabajadores con y sin experiencia.
En este caso, el contrato está asociado con un plazo definido que no puede ser menor de un día o mayor de un año, aunque existen excepciones dependiendo de si el profesional contratado ejercerá funciones de gerencia.
Los contratos por obra o faena concluyen una vez finalizada la tarea o actividad para la cual el profesional fue contratado.
De acuerdo con el Código del Trabajo, en Chile pueden hacerse contratos laborales tradicionales para jornadas de tiempo parcial, siempre y cuando éstas no excedan las 30 horas semanales.
Este tipo de contrato gira en torno al vínculo que sostendrán el empleador y el trabajador. Entre ellos destacan:
Mención aparte merecen los contratos para extranjeros, los cuales deben cumplir con algunos requisitos adicionales como la suscripción del acuerdo ante un notorio, la acreditación de los títulos o la presentación de una visa o permiso de trabajo.
Es importante señalar que todos los contratos de trabajo deben ser firmados en un plazo no superior a los 15 días siguientes a la incorporación del empleado a sus funciones.
Las partes deben firmar dos ejemplares del documento (uno de los cuales será para el trabajador), salvo en el caso de las contrataciones a personal extranjero, en los que se requerirán tres copias del contrato legalizadas ante notaría.
Si estás buscando la manera de optimizar la creación y organización de contratos, hemos preparado para ti una serie de consejos prácticos que te ayudarán en el proceso:
Antes de comenzar a preparar el documento es fundamental revisar los sistemas que empleas para la elaboración de estos, al igual que los procedimientos de capacitación y contratación de personal.
Descubre aquello que funciona para mantenerlo operativo y descarta todo lo que reste efectividad al proceso como antiguos modelos de gestión o modelos obsoletos de plantilla de contrato de trabajo.
Como comentamos previamente, la selección del tipo de contrato de trabajo es una etapa crucial del proceso de contratación. Para ello es preciso ser consciente de cuáles son las reales necesidades de la empresa.
Esta información te permitirá definir el perfil profesional del cargo, las funciones inherentes al mismo y cuántos trabajadores se requieren para cumplir con los objetivos del departamento/ empresa.
Puede parecer obvio, pero una estrategia que permite ahorrar tiempo es comprobar que cuentas con toda la información pertinente para identificar a las partes involucradas, como direcciones y número de Rol Único Tributario (RUT).
Esta medida minimiza la posibilidad de errores en la redacción del contrato y asegura el cumplimiento de la legislación vigente.
El almacenamiento de contratos y las alertas para las fechas de culminación y renovación son algunos de los procedimientos que puedes automatizar, para facilitar la gestión de documentos y agilizar procesos.
Sin lugar a duda, el mejor recurso para optimizar la creación y organización de documentos es contar con un modelo de plantilla de contrato de trabajo actualizado y adecuado a la legislación vigente.
Es por ello que, en Nubox, creamos una plantilla de contrato de trabajo completamente gratis que podrás usar como modelo para celebrar acuerdos tradicionales, de teletrabajo o de suspensión laboral temporal.
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