Uno de los aspectos fundamentales para tener un negocio rentable es llevar una contabilidad ordenada y darle sentido a los números.
Esto va mucho más allá de realizar el tradicional registro de los ingresos y egresos, y de cumplir con las exigencias de las autoridades en cuanto a envío de información y documentación.
Para lograrlo, se requiere aplicar diferentes consejos que le den valor a los números y los transformen en instrumentos y señales claras de la realidad del negocio en determinados contextos.
¿Quieres conocer cuáles son estas recomendaciones que te pondrán de buen humor al cambiar la forma en como mides y analizas los números de tu empresa? Pues bien, ¡sigue leyendo!
Desglose de cada apartado o variable
Básicamente, para tener un negocio rentable, se trata de que los números cuenten una historia o den un reflejo fiel de la dinámica, característica y evolución de cada una de las variables del registro contable, como los ingresos y los gastos.
En el caso de los ingresos, por ejemplo, basarte únicamente en la cantidad de estos evitará que puedas hallar información y elementos valiosos para la toma de decisiones y la gestión del negocio en sí.
Sin embargo, si te basas en lo cualitativo, desglosando de dónde provienen los egresos, con qué frecuencia se generan y otros aspectos, podrás obtener datos interesantes, como cuál cliente es el que te genera más ganancias o cuál es el ticket de compra promedio del consumidor habitual.
En cuanto a los gastos, analizarlos más allá de los valores totales te brindará la posibilidad de detectar qué costos están sobreestimados o cuáles no añaden valor a la organización y, en consecuencia, puedes dejarlos a un lado.
Esto también nos demuestra que desglosar los números y variables es indispensable como estrategia de gestión y prevención de riesgos y pérdidas, lo cual significa un punto clave para obtener un negocio rentable.
Contexto histórico y actual
Es importante evaluar los datos de los libros contables electrónicos y otras bases de información más allá de los números.
Para saber si realmente los ingresos y la dinámica del flujo de caja es positiva —y representan resultados favorables en cuanto a comercialización y ventas— es necesario darle contexto a los valores, tanto desde el punto de vista histórico como actual.
Cuando quieres saber si una determinada cifra es favorable o no, tienes que remontarte —obligatoriamente— a la historia y línea de crecimiento del negocio, ya que así podrás determinar si cada valor se trata de una evolución o de un retroceso.
Por otro lado, es importante que como emprendedor puedas tener claro qué terreno pisas y cuáles factores del entorno te impactan, pues no siempre los números se pueden valorar con el mismo criterio si queremos darles sentido.
Una muestra de ello es la crisis social que experimentó el país en el último trimestre de 2019. Lógicamente, en medio de esa coyuntura, la disminución de las ventas y otros problemas no fueron exclusivamente consecuencias de deficiencias y fallas de la empresa, sino de un entorno hostil para la dinámica comercial.
Según un estudio llevado a cabo por la Asociación de Emprendedores de Latinoamérica, citado por la BBC, el conflicto generó serios problemas de liquidez al 15% de las PyMEs en Chile.
En algunas industrias, como la del turismo, las reservas cayeron más del 50%.
Como ves, realizar un análisis netamente numérico en un contexto con esas características —en vez de uno cualitativo y minucioso— sería un grave error.
Realización de balances e informes mensuales y trimestrales
Las PyMEs se caracterizan por ser volubles y experimentar profundos cambios en periodos de tiempo reducidos. Como quedó en evidencia algunas líneas atrás, este tipo de organizaciones son mucho más sensibles a variables del entorno.
Por esta razón, realizar solamente balances anuales tiene muy poca efectividad si tu misión es darle sentido a los números para poder tomar las decisiones necesarias que logren un negocio rentable.
Lo ideal es contar con informes que resuman el accionar y desarrollo de la empresa en periodos más reducidos, como meses o trimestres.
Además, esto te proporcionará una “radiografía” precisa de la evolución del negocio y sus transacciones.
Por último, no olvides que —independientemente del periodo de análisis— siempre evalúa en términos generales y desde el punto de vista cualitativo.
Apoyo tecnológico
Un detalle relevante para disponer de números con sentido es la forma en que son clasificados y ordenados y, asimismo, la agilidad y efectividad con que se cumple esta organización de datos.
Esto nos traslada de inmediato a los softwares de mercado especializados en contabilidad, gestión tributaria, facturación y aspectos similares.
Esta clase de soluciones sistematizan y automatizan diferentes procesos asociados a la gestión de documentos y datos de interés contable; al mismo tiempo, centralizan todos estos elementos para facilitar el acceso a los mismos y su interpretación.
De este modo, construir balances, hacer auditorías y llevar a cabo otras tareas que permiten revisar y dar sentido a los números se realizan de forma sencilla y en menos tiempo.
Además, tendrás la garantía de que la información y los datos que analizarán serán precisos y fiables.
¡Perfecto! Ya conoces algunas recomendaciones valiosas para darle sentido a tus números y, con ello, construir un negocio rentable.
Tomar en cuenta estos consejos no solo te proporcionará claridad para tomar decisiones y gestionar tu empresa en el día a día, sino también llevar registros contables transparentes y explícitos —con información relevante y de peso— para generar confianza a la hora de buscar inversores, socios y otras fuentes de financiamiento.
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