Las rentas pasivas son una fuente de ingresos que no requiere una participación activa por parte del titular para generarse.

Estas rentas incluyen ingresos provenientes de inversiones, como intereses, dividendos, arrendamientos, regalías, y otros flujos de efectivo que no dependen de la actividad laboral directa.

En Chile, la declaración de rentas pasivas es un tema relevante tanto para personas naturales como jurídicas, ya que el tratamiento fiscal de estos ingresos puede influir en el monto total de impuestos a pagar. Este artículo explora qué son las rentas pasivas, cómo se generan, y cómo deben declararse en el contexto chileno.

Nueva llamada a la acción

¿Qué son las rentas pasivas?

Las rentas pasivas se definen como ingresos obtenidos sin necesidad de una actividad continua o significativa por parte del receptor. A diferencia de las rentas activas, como un salario o ingresos por servicios profesionales, las rentas pasivas provienen de fuentes que requieren poca o ninguna intervención directa. Entre los ejemplos más comunes de rentas pasivas se incluyen:

  • Intereses: Ingresos generados por depósitos bancarios, bonos, o préstamos concedidos a terceros.
  • Dividendos: Ganancias distribuidas por una empresa a sus accionistas.
  • Alquileres: Ingresos obtenidos por el arrendamiento de propiedades.
  • Regalías: Pagos por el uso de propiedad intelectual, como patentes, derechos de autor o marcas registradas.

Tratamiento fiscal de las rentas pasivas en Chile

En Chile, las rentas pasivas están sujetas a impuestos, aunque el tratamiento puede variar dependiendo de la naturaleza de la renta y del contribuyente. La ley distingue entre rentas de fuente chilena y rentas de fuente extranjera, lo cual es importante para determinar la base imponible.

Intereses y dividendos

Los intereses obtenidos en Chile por personas naturales residentes están sujetos al Impuesto Global Complementario (IGC), mientras que los dividendos también están sujetos al IGC pero pueden recibir un crédito por los impuestos ya pagados por la empresa que distribuye los dividendos. Las personas jurídicas, por otro lado, deben considerar estos ingresos en su base imponible para el pago del Impuesto de Primera Categoría.

Alquileres

Los ingresos por alquileres en Chile también están sujetos al IGC. Es importante tener en cuenta que los propietarios pueden deducir ciertos gastos relacionados con la propiedad arrendada, como reparaciones y contribuciones, antes de calcular el impuesto.

Regalías

Las regalías generadas en Chile por personas naturales o jurídicas están sujetas al IGC o al Impuesto de Primera Categoría, respectivamente. Si las regalías son pagadas a una persona no residente, están sujetas a un impuesto adicional.

Declaración de rentas pasivas en Chile

La declaración de rentas pasivas se realiza anualmente a través de la Operación Renta, que se lleva a cabo entre los meses de marzo y abril. Los contribuyentes deben incluir sus rentas pasivas en el Formulario 22, que permite declarar tanto las rentas de fuente chilena como las de fuente extranjera.

Rentas de fuente extranjera

En el caso de las rentas pasivas de fuente extranjera, Chile aplica un régimen de renta mundial, lo que significa que los residentes en Chile deben declarar y pagar impuestos sobre todas sus rentas, independientemente de su origen. Sin embargo, es posible acceder a un crédito por los impuestos pagados en el extranjero para evitar la doble tributación.

Documentación necesaria

Es esencial que los contribuyentes mantengan un registro detallado de todas las rentas pasivas percibidas durante el año tributario, así como de los gastos asociados que puedan ser deducibles. Esto incluye extractos bancarios, certificados de dividendos, contratos de arrendamiento, y cualquier otro documento que respalde las cifras declaradas.

Consecuencias de una incorrecta declaración

No declarar correctamente las rentas pasivas puede llevar a sanciones por parte del Servicio de Impuestos Internos (SII), incluyendo multas y recargos.

Además, una declaración incorrecta puede desencadenar una auditoría fiscal, lo cual puede resultar en ajustes impositivos adicionales.

Conclusión

Las rentas pasivas representan una fuente importante de ingresos para muchos contribuyentes en Chile, y es fundamental entender cómo deben declararse para cumplir con las obligaciones fiscales.

Con una adecuada planificación y una comprensión clara de las leyes tributarias, es posible optimizar la carga fiscal y evitar sanciones. Los contribuyentes deben mantenerse informados sobre cualquier cambio en la legislación que pueda afectar el tratamiento de las rentas pasivas y considerar la asesoría de un contador o asesor fiscal para garantizar el cumplimiento normativo.

Nueva llamada a la acción