Antes de hacer un convenio laboral es importante saber cuáles son las principales cláusulas de un contrato de trabajo y en qué consisten, con el fin de brindar un marco de legalidad que ofrezca una protección para las partes involucradas.
En toda empresa, organización o institución donde se realicen actividades de subordinación, es vital y legalmente necesario que exista una constancia de la existencia de la relación entre empleado y empleador, por lo que es importante que ambas partes sepan exactamente qué es un contrato de trabajo y su contenido.
Y eso es exactamente lo que verás a continuación. Sigue leyendo para que conozcas que debe aparecer en un contrato de trabajo para que cumpla con la ley y algunas cláusulas adicionales que pueden ser útiles.
También llamado contrato laboral, es un documento que contiene todo lo referente al acuerdo entre un empleado y un empleador. Es sumamente importante para una relación laboral, ya que describe todas las condiciones, derechos, obligaciones y beneficios que percibirán ambas partes del acuerdo.
El artículo 7 del Código del Trabajo especifica que: el contrato individual de trabajo es una convención por la cual el empleador y el trabajador se obligan recíprocamente, este a prestar servicios personales bajo dependencia y subordinación del primero, y aquél a pagar por estos servicios una remuneración determinada.
Firmar este documento es útil para ambas partes, ya que deja claro desde el primer momento lo que ambos tienen que dar y lo que van a recibir. Al empleado le sirve porque le permite conocer todos los términos del contrato como el monto de su salario, el horario laboral, las condiciones y como prueba en un juicio.
Por otro lado, al empleador le permite tener la seguridad de que el empleado conoce cuáles son sus obligaciones y que está de acuerdo con cumplir los términos del contrato. También le permite proteger a su clientela y la propiedad intelectual de su negocio, por ejemplo:
Además, aunque es importante y necesario que conozcas al detalle que es un contrato laboral y para qué sirve, ten en cuenta que se trata de un documento obligatorio, es decir, independientemente de que sepas como funciona o no, puedes recibir una sanción si no lo utilizas o si no lo haces constar por escrito. Ten en cuenta que en un juicio, se suele tomar como verdad lo que afirma el empleado sobre los términos del contrato si estos no se han puesto por escrito.
Las cláusulas de un contrato de trabajo son las que describen con exactitud cuáles serán los derechos y obligaciones de los empleados y de la empresa. Como verás a continuación, existen diferentes tipos de cláusulas de este documento:
Para que un contrato sea legal, el Código del Trabajo en su artículo 10 señala que hay una serie de cláusulas obligatorias que debe incluir:
Esta cláusula describe la fecha y el lugar donde se celebró el contrato. Suele ser la fecha del primer día de trabajo del empleado y la dirección de la empresa.
En esta parte se señala quiénes son las partes que firman el contrato. Se incluyen datos sobre la nacionalidad, nombres, documento de identidad, dirección de residencia, fecha de nacimiento, datos de contacto, RUT, razón social e ingreso de trabajador.
El contrato laboral debe especificar de forma clara y precisa cuál será el trabajo que realizará el trabajo, y por el cual recibirá un salario. Se deben señalar dos o más funciones específicas que sean alternativas o complementarias. El significado de cada una es el siguiente:
De igual forma, hay que especificar el lugar o la ciudad dónde se realizará el trabajo. Si por causas laborales el empleado debe desplazarse continuamente, se entiende que el área de trabajo será toda la zona geográfica en dónde tenga lugar la actividad de la empresa.
Como es lógico, toda prestación de servicios debe ser recompensada con una suma de dinero periódica por parte del empleador llamada remuneración. En esta cláusula se debe especificar cuál será el monto de la remuneración, su forma y período de pago previamente acordado con el empleado.
Existen diferentes clasificaciones de la remuneración. Estas son las siguientes:
Además de las clasificaciones, también existen varios tipos de remuneraciones. A continuación, puedes ver cuáles son:
En cuanto al tiempo, la periodicidad puede ser de un día, una semana, quincena o mes, pero nunca puede superar este último y los períodos deben ser iguales, es decir, si ambas partes acuerdan que el pago sea semanal, este no puede cambiar por decisión unilateral a mensual, quincenal o diario.
Una de las cláusulas de un contrato de trabajo que debes colocar es la duración de la jornada de trabajo y su distribución. Legalmente, la jornada laboral debe ser de un máximo de 45 horas semanales, repartidas en cinco días como mínimo y seis días como máximo, y no puede ser superior a las diez horas diarias.
De igual forma, el empleado tiene derecho a descansar mínimo un día a la semana y máximo dos, generalmente sábado y domingo. Aunque, por lo general, se considera que el domingo es un día de descanso, puedes pedirle a un empleado que trabaje ese día —pagándole horas extras— pero solo dos al mes. Es ilegal hacer que un empleado trabaje más de dos domingos al mes, aunque ambos estén de acuerdo.
En cuanto al descanso, la ley obliga que la jornada laboral se divida en dos períodos con un descanso en el medio para que los empleados puedan descansar y comer. El descanso no puede ser menor a treinta minutos y no tiene un tiempo máximo establecido.
En esta cláusula se especifica que tipo de contrato se está firmando. Puede ser indefinido, de prácticas, part time o temporal.
Hay muchas otras cláusulas de un contrato de trabajo adicionales que las empresas pueden incluir para añadir una restricción o aspecto que consideren importante. Estas cláusulas son:
Este acuerdo entre la empresa y el empleado compromete a este último a que, una vez concluida la relación laboral, no podrá trabajar durante un tiempo determinado con otra empresa que sea competidora directa de su anterior empleador.
Este pacto no puede tener una duración superior a seis meses para trabajadores regulares y de dos años para técnicos. Y, por supuesto, el empleado debe recibir una compensación económica suficiente para aceptar esta clase de acuerdo.
Esta cláusula limita el esfuerzo productivo de un empleado a una sola empresa durante un período de tiempo determinado, generalmente como compensación a la formación o especialización que ha recibido de esa empresa. Como el empleado se compromete de forma voluntaria, si abandona la empresa antes de tiempo, el empleador tiene derecho a pedir una indemnización.
Este pacto suele ser uno de los más comunes que puedes encontrar en cualquier contrato de trabajo, tanto que se le podría llamar uno de los esenciales, aunque no sea obligatorio. Es un acuerdo en el que el empleado se compromete a no revelar la información confidencial a la que tendrá acceso debido a la prestación de sus servicios.
El empleado que esté de acuerdo con este pacto puede trabajar con varias empresas simultáneamente siempre que no exista competencia desleal entre ellas. Del mismo modo, la empresa puede pedirle al empleado, previo acuerdo, que trabaje de forma exclusiva con ellos a cambio de una compensación económica.
La Visa de Residencia Sujeta a Contrato es un permiso que se le da a los empleados extranjeros que viajan a Chile y tengan pensado residenciarse en el país para cumplir con su trabajo. Para solicitar esta visa, uno de los documentos requeridos es un contrato de trabajo para extranjeros que contenga, además de otros acuerdos a los que puedan llegar las partes, las siguientes cláusulas especiales:
Se debe especificar la remuneración que va a recibir el empleado según el cargo que va a desempeñar en Chile y según las normas laborales vigentes.
Esta cláusula especial debe ser redactada de la siguiente forma:
Debe ser redactada de la siguiente manera:
De igual forma que las anteriores, esta cláusula debe ser redactada como se muestra a continuación:
Esta cláusula solo se debe incluir si el sueldo del trabajador es superior a 13,5 UTM (Unidades Tributarias Mensuales) y como el resto debe redactarse de una forma específica:
A la par de saber cuáles son las cláusulas de un contrato de trabajo, también es importante conocer cuáles son los tipos de contrato laborales que se utilizan en Chile:
Este tipo tiene una duración determinada que no puede ser de más de dos años si se contrata a gerentes, o personas con un título profesional o técnico, y no más de un año para el resto.
Este tipo de contrato no tiene un tiempo de duración determinado
Como indica su nombre, este tipo de contrato culmina cuando el trabajo por el cual ha sido contratado el empleado se ha completado.
Este contrato se emplea para contratar a un empleado por un tiempo igual o inferior a 30 horas a la semana
Este tipo de contrato no se trata realmente de un contrato de trabajo, aunque es bastante parecido, ya que una parte presta sus servicios por un tiempo determinado mientras la otra se compromete a pagar un monto de dinero por esos servicios, pero se rige por el Código Civil y no por las reglas del Código del Trabajo.
Es considerado como un tipo de contrato de trabajo por faena, pero con la particularidad de que está limitado a trabajos de construcción. Cuando se contrata un trabajador para la construcción de una obra, el contrato finaliza cuando se construye el edificio.
Se trata de un contrato especial de trabajo en el que el empleador —o por medio de un tercero— le imparte los conocimientos y habilidades de un oficio, en un tiempo y condiciones determinadas, a un aprendiz que se compromete a terminar el aprendizaje y trabajar a cambio de una remuneración previamente acordada
Las prácticas profesionales no se consideran dentro del derecho del trabajo chileno, ya que no existe un vínculo de subordinación y dependencia, y el practicante tampoco recibe ninguna remuneración, por lo que no se considera una relación laboral.
Claro está, tampoco hay ninguna ley que impida esta práctica. Para formalizar la prestación del servicio, la empresa debe firmar un "convenio de práctica convencional" con la institución académica del estudiante.
Además de contener las cláusulas esenciales que puedes ver más arriba, en un contrato de trabajo deben existir una serie de hechos que configuren la situación jurídica de la relación laboral. Es posible que en alguna ocasión hayas pensado que, si el empleado no firma el contrato o no tiene una copia del mismo, este no es válido, pero es todo lo contrario.
Un contrato de trabajo es válido y existe cuando se tiene una relación laboral, es decir, cuando hay un vínculo de subordinación y dependencia, por ejemplo: el empleado debe cumplir con un horario de llegada y salida, debe cumplir con órdenes específicas, recibe una remuneración por sus servicios, tiene que usar un uniforme, etc.
Teniendo esto en cuenta, es totalmente válido un contrato de trabajo de palabra en el que las partes, si bien no firman ningún documento, llegan a un acuerdo. Sin embargo, este tipo de contrato no es recomendable porque complica la tarea de demostrar las cláusulas y los pactos que se acordaron en caso de que se celebre un juicio.
Conforme al artículo 9° del Código del Trabajo, desde la incorporación del trabajador en la empresa, el empleador tendrá un máximo de quince días para escriturar el contrato, a excepción de los contratos por obra, trabajo determinado o de una duración inferior a 30 días, en los que el plazo de su escritura se reduce a cinco días.
Ten en cuenta que si tú como empleador no suscribes ni escrituras el contrato dentro del plazo establecido, deberás pagar una multa de 5 UTM y se presumirá legalmente que todas las afirmaciones del empleado, en cuanto al contrato, serán ciertas.
Por otro lado, si el empleado se niega a firmar el contrato, el empleador tiene el derecho de enviar al empleado a la Inspección del Trabajo. En caso de que el trabajador continúe en su negativa de suscribir el contrato, puede ser despedido sin derecho a indemnización.
Según lo establecido en los artículos 159, 160 y 161 del Código del Trabajo, las causas legales para poner término a un contrato son las siguientes:
Para finalizar, como has podido ver, comenzando por las cláusulas de un contrato de trabajo, son varios los pactos y condiciones que se pueden emplear en este tipo de documento, además de las obligatorias, por lo que es importante que al menos conozcas exactamente cuáles son las principales.