Presentar la carta de renuncia voluntaria en Chile es un requisito legal que impone la Dirección del Trabajo cuando el empleado toma la decisión de abandonar la empresa donde labora. A la vez, es un proceso con importantes implicaciones para las organizaciones en términos de gestión de remuneraciones, haberes imponibles y finiquitos.
Según la Inspección del trabajo, es la manera formal de comunicar la dimisión a la compañía en los plazos adecuados y en procura de no causar problemas al empleador.
Este aspecto es muy importante para obtener las debidas referencias laborales que los trabajadores en Chile necesitarán para presentarlas ante un nuevo patrono o en el caso que deseen regresar en un futuro.
La carta de renuncia voluntaria - que al final de una carta de cese de contrato de trabajo - es el instrumento con el que cuenta el trabajador para dar por terminada formalmente la relación laboral.
Este documento debe ser entregado por el empleado específicamente al jefe de Recursos Humanos y tiene que ser elaborado respetando una estructura específica.
Todo esto y más lo explicaremos a continuación, así que, ¡sigue leyendo!
La carta de renuncia voluntaria en Chile le permite al trabajador notificar a su empleador que desea culminar su relación laboral sin otras consecuencias legales que la terminación prevista por la legislación laboral chilena.
Este documento explica al empleador por qué el trabajador decide renunciar y permite dar cumplimiento a lo dispuesto en la Ley en cuanto a la comunicación previa y escrita que debe efectuarse en caso de renuncia voluntaria. El instrumento se rige por los artículos 159, 2 y 177 del Código del Trabajo.
Si desea renunciar, todo trabajador debe comunicarle a su empleador por escrito que tiene la intención de irse, señalando cuándo será el último día de trabajo.
Lo ideal es que este documento se presente en un plazo de 1 mes antes del último día laborable especificado en la carta. De lo contrario, el empleador podría introducir reclamos que abordaremos más adelante.
También, la carta de renuncia debe ser aprobada por un funcionario público, quien puede ser:
Si la carta de renuncia voluntaria no se presenta conforme a los procedimientos legales, el empleador no puede recibirla como válida.
Por tanto, si la renuncia voluntaria no es firmada por el trabajador o este no la ha reafirmado ante el funcionario público, el empleador está en el derecho - y también en el deber - de no aprobar la carta y exigir que el procedimiento se adecúe a la legislación.
Para realizar la carta de renuncia voluntaria en Chile, la Dirección del Trabajo ofrece en su sitio web un modelo que puede ser descargado y, luego, solo se requiere completar los datos solicitados.
En líneas generales, se debe aportar lo siguiente en la carta de renuncia voluntaria en Chile:
Además de estos datos, reiteramos que lo recomendado es entregar la carta de renuncia voluntaria en Chile con al menos 30 días de anticipación.
Aunque dejar un trabajo voluntariamente con menos de 30 días de anticipación no está penado por la legislación, si el empleador cree que la terminación inesperada de la relación laboral le causa un daño económico puede acudir a los tribunales civiles para reclamar una indemnización.
El artículo 159 N° 2 del Código del Trabajo establece que la carta de renuncia voluntaria en Chile debe presentarse por escrito y «con una anticipación mínima de 30 días».
Sin embargo, el Ministerio del Trabajo, en su jurisprudencia administrativa establecida en el Dictamen 289/16 del 1 de noviembre de 1996, señaló que la notificación con menos de 30 días antes del cese laboral no da derecho al empleador de retener la liquidación o cualquier cantidad como compensación por los días de preaviso perdidos, al menos que haya introducido y ganado un reclamo en tribunal civil.
Al recibir una carta de renuncia voluntaria correctamente presentada, en el plazo correcto y ajustada a lo establecido en la norma laboral, el empleador o su gerente de Recursos Humanos debe recibirla, firmarla y entregar una copia al trabajador.
El patrono está obligado a emitir una indemnización y estar dispuesto a pagarla dentro de los 10 días siguientes a la terminación de la relación laboral, independientemente de la causa de la renuncia.
No obstante, la ley da la oportunidad de pactar un pago fraccionado del finiquito, negociando con el empleado (quien no está obligado a aceptar la propuesta).
Para una óptima gestión de los finiquitos se debe contar con una correcta administración de los haberes imponibles y las remuneraciones, registrando todas las compensaciones y pagos hechos al trabajador, así como obligaciones pendientes.
En un software de remuneraciones encontrarás formatos predefinidos de finiquitos y herramientas para el cálculo automático de la indemnización de acuerdo a la antigüedad del empleado, su salario líquido y otras variables de interés-
En el caso de la indemnización por años de servicio, que suele ser la variable con mayor peso en el global del finiquito, equivale a 1 mes de salario líquido por año de trabajo, limitado a 11 años (11 salarios).
¡Y hasta aquí llegamos! Esperamos que esta guía básica para emprendedores sobre la carta de renuncia voluntaria en Chile te haya ayudado a aclarar las dudas que tenías al respecto.
¡Gracias por leernos!