Si estás en busca de financiamiento para iniciar un proyecto empresarial, seguramente te preguntas "cómo postular para emprender un negocio".
En Chile existen diferentes opciones para recibir financiamiento como emprendedor: el acceso a estas depende de lo atractiva y precisa que sea tu postulación, además de los requisitos adicionales solicitados por cada institución.
Algunas opciones muy conocidas en el país son:
Cada oportunidad de financiamiento cuenta con características específicas, pues brindan apoyo en diferentes etapas del proceso de emprendimiento y, en algunos casos, están dirigidas a grupos poblacionales concretos.
Por ese motivo, es primordial que estudies las diferentes opciones para que detectes cuál es la que más se adapta a tu perfil y al proyecto que tienes en mente.
Independientemente de la opción que escojas, existen pasos claves que debes dar para tener mayores posibilidades de resultar beneficiado por una de estas iniciativas y sobre estos factores esenciales te hablaremos a continuación.
En las siguientes líneas, te dejamos una lista de consejos básicos sobre cómo postular para emprender un negocio.
¡Toma nota!
A lo mejor ya tienes una idea de negocios en mente desde hace varios meses y años: si quieres hacerla realidad y postularte para recibir financiamiento, es importante que te asegures de que sea relevante.
Las diferentes instituciones y organizaciones que pueden ayudarte se aseguran de dirigir sus beneficios hacia propuestas que realmente suplan una necesidad en la sociedad.
Por esta razón, toma en cuenta el mercado en el que deseas incursionar y piensa cuáles servicios necesitan ser cubiertos, cuáles son las principales dificultades de los consumidores o cuáles áreas requieren innovación.
Reflexiona sobre este tipo de cuestionamientos y sabrás cómo diferenciar tu idea para hacerla relevante.
Otro aspecto en el que se fijan muchas organizaciones e instituciones es en el compromiso e impacto social del emprendimiento.
En estos tiempos, los mercados demandan que las empresas estén respaldadas por sólidos programas de responsabilidad social y que, además, sus operaciones en sí sean favorables para las comunidades y el medio ambiente.
Por ese motivo, intenta darle un enfoque sostenible y social a tu emprendimiento mediante el equilibrio del compromiso con el entorno y los objetivos de productividad y rentabilidad.
Por ejemplo, si vas a enfocarte en el desarrollo de un determinado producto, incluye métodos de reciclaje y reutilización de insumos en sus métodos de producción.
También, encontrar mecanismos para producir al menor costo posible sin sacrificar la calidad es muy positivo, ya que te permitirá ofrecer precios accesibles que promuevan el consumo de amplios nichos de consumidores.
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Lógicamente, la creación de un plan de negocios es el paso fundamental para realizar una postulación de emprendimiento: este será el documento que las instituciones analizarán en profundidad para determinar la viabilidad de tu proyecto y la conveniencia de brindarle apoyo económico.
Un buen plan de negocios es realista, detallado y estratégico, pues de esto depende que genere confianza e interés.
Entre otras cosas, establece con claridad los objetivos que deseas lograr y, sobre todo, informa sobre las estrategias, operaciones y mecanismos que emplearás para conseguirlos.
También, incluye los recursos humanos, operativos, técnicos y tecnológicos que necesitarás para el emprendimiento, ya que esto influye en su factibilidad y en la inversión necesaria.
Este aspecto puedes incluirlo dentro de tu plan de negocios: al tratarse de un elemento crucial, es importante abordarlo de manera específica y asegurarse de documentarlo lo suficiente.
Las organizaciones e instituciones que brindan financiamiento se aseguran de que los montos de dinero solicitados sean coherentes con la característica del emprendimiento y los recursos que necesita para comenzar sus operaciones.
Un presupuesto de inversión inicial debe incluir todas las áreas a las cuales será destinado el dinero, desde trámites legales hasta la compra de equipos y recursos productivos.
Algunas opciones de financiamiento entregan apoyo en los primeros pasos de los negocios, por lo que también es esencial que documentes el dinero que necesitarás para estos.
Preferiblemente, establece el presupuesto que requerirás en el primer año de operación de tu negocio, tomando en cuenta todas las áreas de su estructura de costos: desde los recursos humanos hasta inversiones en soluciones como un software de facturación electrónica.
Otro criterio clásico que influye en la aprobación o negación de una postulación de emprendimiento y financiamiento es la proyección de un plan en cuanto a la generación de empleos.
Estos programas buscan beneficiar a la sociedad de manera integral y no solo a los emprendedores, por lo cual priorizan negocios y PyMEs que contribuirán con la prosperidad y que igualmente brindarán oportunidades a otros.
Dicho esto, muestra cómo crecerá tu emprendimiento y qué departamentos y áreas demandarán la contratación de empleados.
¡Eso fue todo! Ahora sabes cómo postular para emprender un negocio en Chile. Si sigues estos pasos, ¡tus probabilidades de éxito serán mayores!
Recuerda que debes documentar de manera amplia y precisa tu proyecto, además de orientarlo hacia el beneficio social y la capacidad de satisfacer una importante necesidad en los mercados actuales.
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