Este incentivo está diseñado exclusivamente para empresas clasificadas como contribuyentes de Primera Categoría según las normativas del SII.
Estas empresas, que deben tributar en base a renta efectiva, pueden acceder a los beneficios siempre que cumplan con ciertos requisitos.
Para aprovechar la franquicia tributaria, las empresas deben cumplir con las siguientes condiciones:
Planilla anual de remuneraciones imponibles: Es fundamental que el total de remuneraciones imponibles de la empresa supere las 35 unidades tributarias mensuales (UTM) en el período correspondiente.
Pago de cotizaciones previsionales: Todas las cotizaciones previsionales de los trabajadores deben estar completamente pagadas. Este requisito es crucial para garantizar la participación en los programas de capacitación.
Asistencia mínima a los cursos: Los participantes de las actividades formativas deben cumplir con una asistencia mínima del 75% para que la capacitación sea válida dentro del marco de la franquicia.
Cumplimiento en cursos e-learning: En el caso de las capacitaciones realizadas bajo la modalidad a distancia o e-learning, se exige el cumplimiento total del 100% de las horas establecidas en el programa. Esto asegura que los participantes completen íntegramente el contenido formativo.
A través de esta franquicia, las empresas tienen la posibilidad de financiar el desarrollo de competencias de diversos grupos relacionados con su organización, dependiendo de la modalidad aplicada:
La franquicia tributaria es, por tanto, una excelente herramienta para las empresas que buscan mejorar su capital humano y fortalecer su productividad, al mismo tiempo que obtienen beneficios fiscales significativos.
Las actividades disponibles se agrupan según la relación del participante con la empresa:
Si tu empresa tiene 15 o más trabajadores, deberás formar un CBC, compuesto por representantes de los empleadores y trabajadores en igual proporción. El CBC tiene la función de probar y evaluar las actividades de capacitación o EyCCL.
Elige la modalidad y el proveedor de capacitación que mejor se ajuste a tus necesidades:
Asegúrate de que el organismo elegido esté acreditado por el SENCE.
Tu empresa puede administrar la franquicia tributaria de dos maneras:
Encuentra una lista de OTIC en el registro del SENCE.
Una vez finalizada la capacitación o certificación, debes presentar los documentos necesarios para validar la actividad y recibir el beneficio.
Plazo: Tienes 60 días corridos desde la fecha de término del curso o EyCCL para presentar la documentación en las oficinas regionales del SENCE o en tu OTIC.
El uso de la franquicia tributaria no solo ayuda a reducir la carga fiscal, sino que también genera ventajas tangibles para las empresas y sus trabajadores.
Algunos de los beneficios incluyen:
Incremento de la productividad: Al invertir en la formación del personal, las empresas logran mejorar sus procesos, optimizar su desempeño y alcanzar sus metas estratégicas.
Desarrollo de competencias: Los programas de capacitación permiten a los empleados adquirir nuevas habilidades y conocimientos que los preparan para asumir mayores responsabilidades.
Atracción y retención de talento: Contar con programas de formación robustos posiciona a la empresa como un empleador atractivo, mejorando la satisfacción de los empleados y reduciendo la rotación.
Imagina que eres el encargado de recursos humanos de una empresa que desea capacitar a su equipo de ventas en técnicas de negociación eficaz.
A través del SENCE, puedes acceder a cursos específicos que cumplen con los criterios de la franquicia tributaria.
Al final del proceso, puedes deducir el costo de la capacitación del impuesto a la renta, lo que beneficia tanto a la empresa como a los trabajadores involucrados.
Otro ejemplo práctico es el uso de este beneficio para la certificación de competencias técnicas en áreas como la logística o la administración, donde los empleados obtienen un certificado que avala sus nuevas habilidades.
Esto no solo mejora el perfil profesional de los empleados, sino que también contribuye al éxito general de la organización.
En resumen, la franquicia tributaria es mucho más que un beneficio fiscal; es una posibilidad para fortalecer tu empresa, mejorar tus procesos y potenciar tu empresa a través de la capacitación y el crecimiento de tus trabajadores.
Si todavía no la estás utilizando, este puede ser un buen momento para comenzar.
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